Considerando la articulación temporomandibular como una articulación muy importante de nuestro cuerpo por sus funciones durante la alimentación y la comunicación cuando sufre y pasa desapercibida puede llegar a su limite, afectando el nervio trigémino, causando dolores de todo tipo, complicaciones en oido, produciendo vértigo, etc. A lo que yo llama cadena de eventos infortunados que por compensación, para aliviar dolores, el cuerpo realiza cambios posturales que a su vez tienen una incidencia alta en disfunciones de tipo músculo-esquelético.
Los cambios en la biomecánica de las articulaciones se reflejan en cargas inadecuadas que producen artrosis. Al presentar mayor carga en una articulación las otras también presentan cambios de compensación por tanto es una cadena de dolores y disfunciones.
Lo que es aún más importante considerar es que con un diagnóstico oportuno y un manejo pertinente esta cadena es totalmente prevenible.